Un medio de transporte

                       

 

El hombre gracias a sus piernas puede recorrer grandes distancias, pero su velocidad se veía reducida, aun sabiendo todos que ha estado así durante milenios. En su afán de descubrir e inventar quiso surcar los mares, pero sus piernas no podían hacer frente a los mares que le rodeaban. Fue entonces como observando lo que le rodeaba pudo ver como un tronco de un árbol caído en las aguas no se sumergía, semiflotaba a pesar del oleaje y las corrientes, de ahí surgió su idea llevándola a cabo, esculpiendo en el tronco para poder ahuecarlo. Poco a poco evolucionaría su idea y llegaría a unir varios troncos formando así una balsa, algo más ancha y estable que el simple tronco. En su inicio este medio tan rudimentario era impulsado por las mismas manos y pies del hombre pues la invención del remo llegaría más tarde, toda una revolución y un gran avance por la posibilidad de impulsar y dirigir la embarcación con mayor facilidad, rapidez y eficacia. El hombre seguiría evolucionando y como buen conocedor de su medio natural creó la navegación a vela, un invento que sin duda transformó lo conocido en esa época. Se cree que alrededor del año 1300 antes de Cristo, los egipcios ya poseían embarcaciones a vela se describe como “una nave de vela dotada con velas cuadradas sostenida por dos palos de madera, mástil largo vertical en la parte superior y una botavara o palo transversal en la inferior que presentaba remos para su dirección”. A lo largo se su historia llegó a  diseñar diferentes tipos de barcos como son las Galeras, los Naos y las Calaveras con el fin de surcar tierras desconocidas, para sus propias guerras y futuras comercializaciones de materias primas. Los avances que se hicieron, aun en día nos dejan perplejos, como pueda ser la colocación de un timón central, el aumento del número de mástiles o el cambio de las velas cuadradas por las rectangulares. En los sucesivos años el barco ha avanzado y creado nuevas formas y nuevos materiales, pero sin duda lo que cambio el rumbo de la navegación fue la sustitución de la madera por el hierro y posteriormente por el acero y la invención de la máquina de vapor por Watt. En la actualidad los transatlánticos llevan centenares de pasajeros a grandes distancia y velocidades, pero un método especial y único es la creación del submarino, el único vehículo capaz de viajar por debajo del mar. Si duda una gran historia que aún no tiene final.